Anahi Lazzaroni,   Argentina, 1957


Canción sin partitura

Nada está escrito en ningún lado,
ni las canciones viejas
que nos llegan a la memoria
para salvarnos del invierno,
y se hunden bajo el grito constante
de los pájaros nocturnos.
Nada está escrito,
ni esos terrores marcados a fuego
que aparecen en los sueños,
ni las alegrías
o el olvido mismo.
Nada está escrito en ningún lado
Y los locos,
los pobres locos
ya no dibujan árboles
en las paredes vacías.


Mirando por la ventana

Aleteos de pájaros
y el cielo tan oscuro,
los árboles
se agitan en danza.

Por la calle corre
aire frío.

El cartero y su bolsa
pasan de largo.


Noticias de la ciudad

Los dioses no se detuvieron
en esta ciudad arisca
y asesina.
Antiguos como el mar
más testarudos que una mula,
recalaron con sus dones
en otras tierras.
Quien no lo sepa,
quien intente negarlo,
padecerá sus trampas.


 
A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z

Página Principal       Spanish Poetry