Beatriz Pérez Deidda,   Argentina


El vagabundo

Nadie advertía su perfil escaso,
ni esa mirada gris y misteriosa.
Vagando por la selva rumorosa
él marchaba con él, y su fracaso.

Indiferente, con liviano paso,
iba la caravana presurosa;
lo que veían pasar, no era otra cosa
que un oscuro remedo del ocaso.

Un manojo de nada, puesto al viento
como un fruto reseco, sin esencia,
al que no caben ley ni penitencia,

ni tan sólo el cuidado de un momento.
Cuesta pensar, sin que pensarlo asombre,
que un día fue. Que tuvo un sol y un nombre.


 
A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z

Página Principal       Spanish Poetry