|
|
Félix Pita Rodríguez, Cuba, 1909
Soledad
Soledad no suena a nada.
Se dice y queda en el aire
como un hueco sin palabra.
Soledad: trigo vacío.
Soledad: naranja blanca.
Le hizo un arquitecto muerto
su arquitectura callada.
¡Soledad!
y nos parece
que aún no ha sido pronunciada.
Pero está, torre de espinas.
¡Soledad!
y se hunde, doliente piedra
en un barranco sin fondo,
sin música, letra sólo.
Soledad no suena a nada.
|
|
|