|
|
Sotero Rivera Avilés, Puerto Rico, 1933
Noción de lo imposible
Llegó una tarde
yo brillaba zapatos
era tan indeciblemente hermosa
que tuve lástima de mí
Me observó como un bajo crepúsculo
y zozobrando pensé en amaneceres
qué orillas qué tierra me abrumaron
era algo más allá de mi vida
Recelé entonces que el cielo era imposible
y nunca fui tan lastimado
|
|
|